Monday, August 25, 2008

Prototipo para folleto de re-mal

La creencia es un arma, los cristianos gatillan sus propias cabezas. La droga, ¿la invento dios? ¿Dios es droga? ¿La droga no existe? ¿Cualquier cosa puede ser droga para los humanos? Asumamos que todos enfermamos el mundo (más allá del humano) y que el cáncer es la enfermedad industrial, o sea que el capital es un cuerpo simbiótico patológico.




TV = Droga de consumo masivo inhibidora de la crítica concreta, llevando a todos los hogares la espectacularización que consume la vida, y la separa.

Corto plazo= Centralización habitacional del punto audiovisual de atención, conversaciones transformadas en comentarios pasivos.

Largo plazo= Irritación de ojos y espalda desatendida, tevedistórfia. Sedentarización, desgano. Miedo a la soledad, escape en el ruido televisivo. Miedo a la calle de noche, encierro en la casa, correr del auto al negocio y del auto a lacasa, aliviarse al cerrar la reja. Síntomas de un aislamiento de la clase media trabajadora que se enjaula de su barrio y no tiene vecinos amigos. No tiene que haber muchos robos para que haya inseguridad, la hay desde que tenemos tanto miedo. Lo más nocivo son los canales de aire totalmente modulados por empresas corporativas, tanto noticieros como programas que nos ocupan en espectáculos burdos.

Publicidad = La droga simbólica de consumo más difundido por la tv. Virus que se nos mete para enfocar nuestra energía en consumir objetos destinados a no durar mucho tiempo.




AUTOS = Dos o tres personas para moverse en una ciudad mercerizada congestiona la calle, hace más mal el humo de los escapes que el de marihuana, y ni hablar de la agresividad que queda manifestada al volante, acumulada por el conformismo laburante. Peceras cuatrí-ruedas son como prótesis del conductor con mucho poder destructivo si hay bronca del manejante. Por todo esto y más hay que considerar al auto como una peligrosa droga que afecta nuestra salúd (más que nada en un ritmo de vida de trabajo de servicio que es otra droga que aumenta la intoxicación por consumo de autos).




FUTBOL = Jugar al fútbol con los amigos es parte de la buena salud. La droga futbolera consiste en infectar con una pasión de masa (equivalente a la fe cristiana, o al patriotismo) que genere: inclusión psicoafectiva en un club en el que solo se participa como espectador, y rivalidad estéril infundamentada contra fanáticos de otros equipos. La regulación emocional del cuerpo es condicionada por los resultados de los partidos, aportando alegrías y tristezas tan cercanas como alejadas estan de lo cotidiano. Muchos hinchas se las arreglan para energizarse del fanatismo colectivo, pero los mordidos por la sanguijuela-tv lo usan como narcótico dada su miserable vida. Basta ver los carteles en las canchas para saber quien auspicia este narcotico de distracción masiva.


PSICOFARMACOS = Ahora los psiquiatras quieren ayudarnos sin internarnos, que el loquero se agrande y no dejemos de trabajar. Estos enfermos engendran drogadictos (o reemplazan al paciente drogas asociales por otras que regulen el tiempo de su sueño). La peste del psiquiatra no quiere encontrar las causas de la depresión en la vida social que nos aplasta y podemos transformar, en vez de eso ve a la depresión como una falla química cerebral a normalizar con una pastilla ansiolítica, o benzodiascepinas. Los médicos son los verdaderos creadores de muchas enfermedades, ellos anexan a las pastillas cierta moralización que no hace bien al cuerpo; la creencia en sus consejos juega un nuevo elemento en la enfermedad, la predisposición del paciente hipoteca su salud. Promotores de esta droga: farmacéuticas y empresas de medicina privada. Generan rápida dependencia psi-física por lo que el afectado está obligado a comprar las pastillas. Resultado: síndrome neuroléptico maligno (catatonia, acaticie, somnolencia, etc –solo hace falta ver las contraindicaciones de las pastillas).

TRABAJO/
INDUSTRIA
= El trabajo como lo conocemos y la utilidad que le damos es una gran droga de consumo masivo. Al igual que las sustancias químicas, el cansancio corporal es una ebriedad que muchos experimentan día a día. El problema de estos estados de trance por cansancio es que son puestos al servicio de una distracción para ganar dinero. Si bien generamos un modo de vida que depende de este dinero, el trabajo también funciona como un fármaco para no sentirse inservibles, para sentir que “se hace algo”. Desgraciadamente el mundo del trabajo que hoy en dia es en su mayoría tercerizado, solo produce servicios de los cuales podríamos totalmente prescindir para seguir viviendo. Es más, la mayoría es un esfuerzo derrochado solo por un sueldo, energía que podría ser empleada en autonomía alimentaria pero cuesta hacer algo sin un jefe. Sin contar que los sectores industriales producen el cáncer, y que los monocultivos cada vez alejan mas a las personas de cosechar, vamos a tener que cambiar nuestra concepción de lo que es trabajo util para para la vida. Mientras sigamos trabajando sin jugar nuestra vida seguira siendo una miseria en eterna espera.



AGROQUÍMICOS = Las drogas se suministran masivamente a los ecosistemas. El cuerpo social cree verse afuera de la naturaleza produciendo de ella, pero controlando su mercantilización. La cosecha actualmente se modula desde corporaciones creciendo el latifundio y el trabajo con grandes máquinas que solo los propietarios consiguen. Los bosques de Suramérica se desmontan para ser campos monocultivizados a soja transgénica son rociados de glifosato (round-up) toxico para el suelo y los que respiran la ciudad, los pájaros, etc. Quedan todos drogados sin elegirlo. Esto, sumado a las dioxinas de fábricas y autos, los transformadores eléctricos con pvc, son la principal droga productoras de cáncer en el mundo (enfermedad típica de la civilización post-industrial). ¿Estamos siendo injustos con los bioquímicos que estudian cómo lograr que las frutas se vean más lindas e iguales pero sean insaboras? Ellos han sido preparados, educados, titulados, pasterizados y programados para obturar el uso que se le da a lo que estudian, y su sueldo lo pagan corporaciones (si bien podría usar lo que sabe para algo mejor).

CORPORACIONES/
MERCANCÍA
= Celulares, luz, gas, Internet, coca…


Cuando la factura nos roba no podemos ni hacer cosquilla a las empresas, solo desquitarnos con algún empleado. Los consumidores no tienen poder con abstenerse a comprar, a menos que también tomen el poder de quemar una empresa. No debemos tener miedo al futuro sin empresas, no hay futuro con ellas, solo un presente de resignación cómoda (mientras podamos) y esclavitud digna. Ya no son el gobierno (aunque manejen sus hilos haciendo pantalla) sino que gobiernan todo manejando los precios y sueldos, con la policía de su lado. El miedo que inculcan controlando los medios de comunicación responde a su necesidad de mantenernos dentro de casa drogándonos con lo que nos dan. La mercancía es la droga más nociva en este planeta capitalista, y los responsables de su difusión son las empresas corporativas. La forma de trabajo más destructiva es producida por ellas: horarios flexibles, trabajos controlados y vigilados, competencia entre pares por conseguir asensos. El marketing estudia qué drogas simbólicas son mejor para enviciar a la población por publicidad.

Etiología distal

Se puede hacer el camino inverso a la progresión exploratoria que la biología supone al cerebro respecto al cuerpo. Esto es distalizarlo. La memoria que nacería en el cuerpo no sería administrada por la mente, este instrumento despertaría según tiren los hilos de las sensaciones ubicuas.
La medicina tradicional creó una etiología atrapada en el "síndrome mental" (usando sus términos) de la creencia científica. La subordinación de las funciones al mandato cerebral confunde la introyección y formación que llevan a cabo los caminos nervio-neuronales interdependientes. La ilusión de que el control se origina en el cerebro quizá sea un resabio de formas de pensimiento estatal. Este prejuicio medico aleja los síntomas de los procesos maquínicos simbólico-sociales.

Loco es el incomprendido

Basta ignorarme para seguir postergando el hoy por unas comodidades de drogadicto civilizado. La era del plástico es ya basura pura, esta intoxicando mucho más que a los humanos. No sirve deprimirse por la irreversibilidad de la "catástrofe" ecológica, el tiempo parece corto solo para los ingenuos humanos que quieren salvarse teniendo un terrenito cuando están cerca de perder todo ese mundo industrializado y avanzado hundido en el caos de los reajustes naturales. Se cae hasta lo que los humanos llamaban naturaleza, pero todas las convenciones, leyes, creencias y comodidades mueren en el caos natural. Debemos transformar en fiesta los momentos de incertidumbre apocalíptica, y las fiestas no son estériles si queman burocracias y corporaciones (si no mueren ellas nos hacen zombies).

Diagnostico

El cáncer es la civilización, lo produce su industria, las represas no solo matan todo sino que exilian pueblos, como el agua contaminada y desperdiciada de nuestros grifos, el rocío que hacia el ocaso infesta el aire de glifosato que fue vertido sobre la profundidad del campo sojizado en América (monsanto corp), que después deviene comida de granjas industriales europeas que abarrotan vidas animales, con la subsecuente deforestación para plantar la soja transgenica que desemboca en inundaciones aquí, sequías allá. La mierda no vuelve a la tierra, podríamos en vez de tirar tanta agua con la cadena, hacer compost (fertilizante) con la caca y los residuos orgánicos, podríamos preocuparnos por reforestar que son muy necesarios los bosques. Estas son algunas leves consideraciones para un reverdecer y replanteamiento grupal, colectivo. También individualmente hay que hacer huerta en la ciudad hasta los techos, y plantar arboles frutales en el medio de la calle quitando la cápsula de cemento que oprime la tierra.

No voy a dar ninguna solución rotunda o normativa. La receta puede ser mejorada con la creatividad que pueda surgir de la apropiación del juego público y una nueva imaginación ecosófica. Pero está claro que hay que desmembrar la industria y nuestras derrochonas costumbres de drogadictos: una pista de por donde ir nos la da la permacultura, una forma de cosechar que intenta imitar el diseño natural de las cosechas sin intervenir tanto matando lo que no queramos de la huerta.

Re-Mal permite y alienta que cualquiera reparta el folleto de la manera más gustosa (si no se disfruta de vociferar en colectivos, dejar debajo de la puerta –tirarlo por las rejas de las casas para que llegue a los drogadictos).

Re-Mal es consciente de posibles tergiversaciones de generalizaciones como “la droga”. Como esas organizaciones (ya sean iglesias re-mar, o psiquiatricos de hogar) que ofrecen más drogas para abandonar algunas otras drogas asociales que no abarcan las más peligrosas.

La lógica de “Re-mar” (rehabilitación de marginados, osea “te marginamos para habilitarte nuevamente”) que culpabiliza a las víctimas y ni nombra, ni se acuerda de quienes manejan los carteles de “narcotráfico” y de trabajotráfico (empresas corporativas).